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El Estrés Y La Pérdida De Cabello

El estrés y la pérdida de cabello

El estrés y la ansiedad están considerados como una de las causas mas comunes en la pérdida de cabello, mucho más de lo que la mayoría de las personas piensan, el Dr. Benarroch considera indispensable el manejo del estrés como parte importante en el tratamiento de la pérdida de cabello.

La pérdida de cabello se conoce clínicamente como Alopecia. Tanto los hombres como las mujeres pueden experimentar pérdida de cabello en algún momento de su vida por diferentes causas.

En estos momentos que la ansiedad, las preocupaciones y la incertidumbre están presentes en nuestras vidas es muy frecuente que también puedan causar la caída del cabello.

La perdida de cabello producida por estrés o ansiedad suelo empezar a partir del mes posterior a un evento estresante, y esto es debido al ciclo de crecimiento del cabello.

Los tipos de pérdida de cabello más relacionados con el estrés son: Efluvio Telógeno (caída excesiva del cabello a diario), Alopecia Areata (pérdida de cabello en zonas), Tricotilomanía (arrancamiento del cabello) y Alopecia Androgénica (adelgazamiento del cabello).

ESTRÉS Y EFLUVIO TELÓGENO

El efluvio telógeno es una forma de pérdida difusa (generalizada, no localizada) de cabello en el cuero cabelludo.

Ocurre cuando la fase anágena (de crecimiento) del ciclo de crecimiento del cabello se interrumpe por una alteración interna en el cuerpo.

Esto hace que muchos más pelos de lo habitual pasen de su fase anágena a su fase telógena (caída), lo que provoca una caída excesiva de pelo diaria.

El estrés es una de las causas más comunes del efluvio telógeno. Esto se debe a que cuando estamos estresados a menudo cambiamos nuestros hábitos alimenticios afectando a la digestión y a la absorción de nutrientes vitales por parte del cuerpo.

Dado que el cabello es un tejido no esencial, suele ser lo primero en sufrir si el cuerpo carece de nutrientes.

Los desequilibrios vitamínicos, la deficiencia de hierro, la ingesta inadecuada de proteínas y las comidas que contienen muy pocas calorías pueden contribuir a la caída del cabello.

El estrés afecta a nuestro sistema inmunológico, haciéndonos más susceptibles a las enfermedades.

Enfermedades como la gripe, las fiebres altas y los trastornos sistémicos suelen provocar la caída del cabello.

ESTRÉS Y ALOPECIA AREATA

La alopecia areata (pérdida de cabello en zonas aisladas) es una condición que causa que areas específicas de calvicie aparezcan en el cuero cabelludo. Suelen ser de forma circular y del tamaño de una moneda.

La alopecia areata es un trastorno autoinmune en el que el cuerpo ataca ciertas células capilares, el mecanismo que lo desencadena no esta totalmente claro pero en un 90% de los casos están asociados con el estrés, shock emocional repentino, un periodo de duelo, una enfermedad o un accidente.

ESTRÉS Y TRICOTILOMANIA

La tricotilomanía (también conocida como trastorno por tirar del cabello) es una forma de pérdida de cabello causada por una urgencia irresistible de arrancar el cabello, ya sea del cuero cabelludo o de cualquier otra parte del cuerpo.

Puede dar lugar a pequeñas o grandes calvas, y suele ser extremadamente angustiosa para quienes la padecen.

Las causas de la tricotilomanía son psicológicas, y a menudo son complejas. El estrés es un factor importante que contribuye, así como la ansiedad, la depresión o una experiencia traumática.

ESTRÉS Y ALOPECIA ANDROGENICA

El adelgazamiento del cabello tanto en mujeres como en hombres es genético, y puede ser heredado de cualquiera de los padres. Es causado por una sensibilidad en los folículos pilosos a una forma de testosterona llamada dihidrotestosterona (DHT).

Los folículos pilosos se miniaturizarán gradualmente y se adelgazan con los años, reduciendo el volumen, el diametro y la longitud del cabello, haciendo más visible el cuero cabelludo.

El estrés puede intensificar significativamente los efectos de la alopecia androgénica. Una de las principales razones de esto es que el estrés a menudo aumenta la producción de la hormona del estrés, el cortisol, y el cortisol puede a su vez aumentar los niveles de testosterona de su cuerpo.